En esta etapa los niños de 6 años inician el camino de la catequesis, y para ello, lo que se pretende es despertar la fe en ellos a través de la experiencia. En este camino, una mascota especial los acompaña y también unos catequistas con mucha experiencia y creatividad. Ellos son Ana, Rebeca, y Mª Yolanda. A decir verdad, para los niños, estas catequesis son muy especiales, pues disfrutan mucho (se les pasa volando) y comienzan a descubrir un gran amigo para sus vidas, Jesús de Nazaret.
Las sesiones del despertar religioso son: los martes a las 17:00h y 18:15h, y los miércoles a las 18:15 horas. En este curso, más de 70 niños vienen al despertar.
Hola amigos!
Soy Leo, el león que te ayudará a despertar la fe.
Recogemos aquí algunas experiencias de estos animadores y de la gran labor que desempeñan. Gracias por vuestra dedicación y por ese cariño y entusiasmo que ponéis.
Somos un equipo de catequistas con niños y niñas de seis años que han comenzado su andadura en la catequesis para conocer un poco más a Jesús y acercarse más a él , tarea que tratamos de hacer lo mejor posible. Ellos al mismo tiempo nos aportan su inocencia, alegría y en ocasiones nos hacen reflexionar con sus inquietudes pero siempre con una sonrisa y mucho cariño. GRACIAS
Mª Yolanda González
Mi experiencia con los más pequeños es una mezcla de agradecimiento por permitir entrar en esos pequeños corazones y de asombro por lo que son capaces de aportar los niños con tan corta edad…En cualquiera de los casos mi percepción es muy positiva…tanto por lo que doy a los peques…por lo que comparto con los catequistas y por lo que recibo de ambos… Gracias.. Gracias y Gracias
Ana Isabel Fernández
Dar catequesis a los niñ@s del despertar es una de las experiencias más bonitas que he tenido como catequista. Motivarles cada día a través de un personaje, con dinámicas y compartiendo pequeñas experiencias de su día a día, hace que surja en ellos un deseo por conocer a Jesús. Es muy gratificante ver cómo se sorprenden e interesan con todo lo que hacemos y la alegría que desprenden. Sólo puedo estar agradecida por todo lo que compartimos juntos.
Rebeca Vesga